Iniciamos el día con la exposición clara y clarificadora de Pedro Agulló, joven filósofo que partiendo de las bases de la antropología cristiana nos fue exponiendo con gran destreza cómo la castidad, en las relaciones de pareja, es precisamente la que preserva la libertad de la misma y abre el camino a un amor más pleno y plenificante a la relación. Bea Herrera (bióloga) recién casada, desde la vertiente científica, fue mostrando y desmontando ciertos tópicos difundidos sobre la presentación del sexo libre como algo que realiza a la persona. En la tarde, de modo vivencial, pudimos escuchar el testimonio de dos matrimonios que, partiendo de distintas situaciones, el haber vivido o no su noviazgo en castidad, condicionó sus primeros años de matrimonio. Todo esto pudimos ponerlo a los pies de JESÚS en la adoración que culminó el encuentro.